lunes, 21 de junio de 2010

Balompié

"El balón cruza la media cancha en un claro contragolpe; 'J' toma el esférico, el cual controla desde la banda izquierda del campo. Cruza la mirada, la velocidad es apabullante; solo le pueden seguir el paso dos defensas. se encuentra a 40 metros, 30 metros, 20 metros, el balón roza el área grande del equipo contrario. El portero se ve forzado a salir, ¿Qué es esto? 'J' frena su carrera, levanta la cabeza, ha ubicado al cancerbero...Tira un trallazo ¡Un trallazo! ¡Directo a la puerta! ¡Increible! ¡¡Las llaves se rompen!!¡¿LAS LLAVES SE ROMPEN?!"...

Si; mis llaves se rompieron ante el espeluznante ataque de un balón Voit del número cinco. Me veo obligado a detener la fantasía y tomar una llave de repuesto para correr y verificar si el cerrajero aún no cierra el local. Camino aproximadamente unos 5 minutos para, afortunadamente, conseguir la copia. ¿Tanto mareo por una llave? Si; mañana juega La selección Mexicana de Balompié y las necesito.

Jueves 18 de Junio 2010. Pasadas las 3:30 terminamos con las gargantas destrozadas, viendo como el mismo seleccionado gana un partido ante su ¿Similar? de Francia. Lentamente nos retiramos no sin antes recibir la invitación "Quien guste venir el Martes es bienvenido" Sea así pues.

Década de 1990 - 1999. Un vínculo entre mi padre y Yo era asistir a sus partidos llaneros. Jugaba de portero. Mi padre durante esa época fue algo arisco y no muy expresivo, nunca me preocupo porque todo eso lo veía a la hora que se ponía los guantes. Yo siempre quise emularlo, no solo porque era bueno (de hecho tenía problemas con los tiros razos) sino porque, aunque fuese muy explosivo o gritón a lo tuca él lo disfrutaba. Pero para mis compañeros pamboleros nunca fui un digamos un Campos en potencia, mucho menos un Suarez, un Sanchez; nada. Viví muchos partidos en la banca, aunque no se acompletaran. Ni siquiera si yo llevara mi balón, de alguna manera terminaba en el lugar indicado, banca por la izquierda.

Desde esas experiencias de segunda infancia,  muy lejos de terminar odiando el deporte; aprendí lo básico de posiciones, y aunque paupérrimamente tengo algo de noción me ha servido para mantener ese vínculo con mi padre, con el cual siento un dejo de deuda porque nunca pude formar parte de un equipo de balompié y por ende nunca fue a verme jugar.

Por eso mismo escuchar excusas de que es un deporte para brutos o que solo a los idiotas/nacos/pobres les gusta, comprendo que fueron personas que nunca pudieron salir ni a la banca y tienen rencor ante esa situación. Comprendo que duele ser ninguneado pero nuestra ineptitud a la hora de patear un balón (por más burdo que eso pueda sonar tiene su chiste y lo saben) no es razón suficiente para denigrar tan bello deporte.

Lunes 19 de Junio. Conseguidas las llaves recuerdo que van como 5 repuestos por exactamente la misma razón, y se me olvidó otra vez volver a considerar sacar más de un juego. Considero dormir temprano porque el lugar de reunión me queda a una hora de viaje y debo levantarme muy temprano, porque aún no se como es posible que un bello deporte adquiere más belleza si lo ves acompañado.

1 comentario:

Gusana :D dijo...

Hey primo al menos con nosotros sí eras un Jorge Campos; te recuerdo con tus trajesitos verde limon, negro con rosa así bien folkloricos; como los de Jorgito jaja y hombre parar balones con la cara era nuestra especialidad. Más valia perder la cara que las rosas de abuelita jaja. Muy buena tu entrada de este bello deporte me hiciste recordar nuestra infancia.